EL AUTÉNTICO ACTIVISMO O LA PASIVIDAD EN “EL EFECTO MARIPOSA”

El tema del “auténtico activismo” es necesario abordarlo con visión holística y enfoque del “efecto mariposa” para entender las causas, los efectos, los tiempos, y contrarrestar la percepción de que estamos inermes y a la deriva, para con ello tener la opción de encontrar: “el sentido y significado, lo importante y lo que tiene una razón de ser” propios; para motivar y disparar nuestras “acciones enfocadas” reduciendo la diseminada, la desparramada pasividad.

Para un mayor entendimiento y manejo del tema, podemos desglosarlo en cuatro tipos de “activismo auténtico” parafraseando a Ervin Laszlo, en el libro “Cambio Mundial 2012”:

Activismo cívico,

“Activismo cívico” nos dice E. Lazslo, significa e implica interactuar con las personas e instituciones que gobiernan tu estado o comunidad. Nos sigue diciendo al respecto que lo prioritario, lo más importante que debes pedir a tu gobierno es que reconozca y respete los valores básicos de la comunidad; así como enfatiza también que considerando y conociendo las enormes cantidades de dinero que circulan en el mundo, se concluye que es factible financiar indispensables proyectos que coadyuven a nuestro bienestar. Se estima que aproximadamente el 6 por ciento del flujo total global de dinero que circula en el mundo (un billón de dólares diario) se utiliza en” bienes y servicios reales e inversiones legítimas”; y el resto se utiliza para especulación, es decir hacer más dinero con el dinero. Saquen sus conclusiones.
Activismo en los negocios y el trabajo:

De las empresas, hemos concluido –en el nuevo paradigma emergente- que ya no pueden considerarse más como el “sector privado”, pues no pueden estar divorciados de lo que necesariamente les atañe como: “LA VIDA Y EL BIENESTAR”; tienen que indiscutiblemente involucrarse a trabajar por el bien público. Entre otras medidas o sugerencias de “activismo auténtico” para los que tienen cierta capacidad económica, es optar por la “inversión social”; ejemplo, al adquirir acciones de empresas, evitar las de ámbitos tales como: alcohol, tabaco, juegos de azar, pornografía y suministros militares entre otros. Las empresas –se debe recalcar- que hacen “lo bueno” para la comunidad y la sociedad y lo hacen bien, será una realidad que puedan contar con un alto nivel de confianza del público y con clientes leales. Lo que les ayudará a tener mayor oportunidad de sortear los vaivenes del mundo de los negocios con más consistencia

Activismo en los medios:

Para los medios de comunicación de tipo comercial, la investigación de mercado en el corto plazo, decide “que busca el público”, es decir, en lo que los ejecutivos de los medios de información creen que está interesado el público o el mercado. Piensan que –el público- está interesado en sólo pocos temas como pueden ser la guerra, el crimen, los deportes, la bolsa de valores, y además lo que hace las celebridades, y en temas sensacionalistas. El problema es que una “dieta” de tales temas para el público no les entrega la información y las ideas necesarias para decidir los asuntos que realmente incumben a nuestra vida y nuestro futuro.

Por ello seleccionando libremente programas de televisión y radio, sitios de internet, periódicos, revistas y libros, les estaremos dando a los medios de comunicación, el apoyo para que crezcan con más velocidad y promover con ello, un círculo virtuoso de los medios con su audiencia para generar la demanda que sea de mayor interés, sentido y significado para el público.

Activismo personal:

Muchos aspectos de nuestra vida privada se convierten en asuntos públicos, pues lo que hacemos afecta a los otros y esto nos lleva a una constante transformación para: o una mejora del mundo o para bloquearla. Quiéraselo o no, somos todos en lo particular o un agente de cambio o un guardián de la cultura obsoleta.

Como corolario y para fines prácticos nos debe quedar claro que: LA REALIDAD en el enfoque de “la cuántica”, no existe previa y fatalmente; la creamos cada uno de nosotros con nuestras decisiones y acciones, con características –según la Teoría del Caos- de aleatoria y autoorganizada. Lo que nos lleva a anular el “pensamiento mágico” que nos limita, configura y refiere a pensar que: “UN ALGUIEN” o “UN ALGO” va a realizar aquello que es necesario para nuestra existencia y que nosotros equivocadamente podríamos esperar pasivamente a que ello suceda.

Ser actores y protagonistas, no espectadores nos “obliga” a conscientemente decidirnos a llevar a cabo acciones que sean constructivas para la comunidad. ¿O cual es la alternativa?

Artículo publicado en el periódico El Regional, del Estado de Morelos; Sábado 30 de abril del 2011